Soy de los que piensan que los éxitos se saborean mejor si somos conscientes de lo que han costado, de los momentos difíciles que se han pasado antes y del esfuerzo para alcanzar una meta.
Para ello echaré la vista atrás.
Tenía 10 años. Era un 27 de junio de 1984, fecha de la final Francia-España en la eurocopa de fútbol del '84, en el estadio del Parque de los Príncipes de París.
España, con Arconada, Víctor, Urquiaga, Camacho, Salva, Señor, Julio Alberto, Gallego, Francisco, Santillana y Carrasco, se enfrentaba a la Francia de Platini, que en el minuto 57 del partido, con el 10 a la espalda, lanzaba una falta en la frontal del área, y ...
Hoy es el día en el que el mal trago, la decepción y la tristeza de un niño de 10 años, y otros muchos de aquella generación así como de otras posteriores, algunos que ya no están entre nosotros, pueden quedar en un segundo plano, con la alegría de un final ganada, 24 años después, en un partido que, perdamos o ganemos, nunca olvidaremos.
España, con Casillas, Ramos, Puyol, Marchena, Capdevila, Senna, Xavi, Iniesta, Silva, Cesc y Torres, alineación que ya sabemos de memoria, intentará ganar la eurocopa de fútbol de 2008, en la final ante Alemania.
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